Letra, música e intérprete: Roberto González.
Disco: Lentejuelas.
Este disco tiene dos versiones, pues Roberto González lo regrabó y reeditó. En el nuevo disco esta canción tiene dos versiones, y no una sola, como en el original. La versión más nueva de esta canción cambia “la relación”, en lugar de “la Selección”, lo que, me parece, mejora la letra. Sin embargo, he preferido la versión original para este análisis.
Disco: Lentejuelas.
Este disco tiene dos versiones, pues Roberto González lo regrabó y reeditó. En el nuevo disco esta canción tiene dos versiones, y no una sola, como en el original. La versión más nueva de esta canción cambia “la relación”, en lugar de “la Selección”, lo que, me parece, mejora la letra. Sin embargo, he preferido la versión original para este análisis.
Soy el mexicano medio,
y no me siento muy bien.
La Selección no es mi fuerte,
más bien de todo también.
¿Soy feliz o sigo errante?
Y me pregunto dormido
qué intimidad compartí
para estar aquí metido
y sólo a veces salir.
De lo que sé, nada sirve
para poderme olvidar
de que no estoy muy contento
ni tampoco en el lugar.
¿Soy feliz o sigo errante?
y no me siento muy bien.
La Selección no es mi fuerte,
más bien de todo también.
¿Soy feliz o sigo errante?
Y me pregunto dormido
qué intimidad compartí
para estar aquí metido
y sólo a veces salir.
De lo que sé, nada sirve
para poderme olvidar
de que no estoy muy contento
ni tampoco en el lugar.
¿Soy feliz o sigo errante?
¿Soy feliz o sigo errante?
De repente sí me meto
—para poder respirar—
a un mundo de lentejuelas,
donde sí aprendí a mirar.
Después siempre me regreso
a pasarme por aquí,
y resulta divertido
cómo todo sigue ahí.
¿Soy feliz o sigo errante?
Sigo ausente y voy por ti.
De repente sí me meto
—para poder respirar—
a un mundo de lentejuelas,
donde sí aprendí a mirar.
Después siempre me regreso
a pasarme por aquí,
y resulta divertido
cómo todo sigue ahí.
¿Soy feliz o sigo errante?
Sigo ausente y voy por ti.
Roberto González nos entrega una típica canción críptica suya (basta recordar Algo, El palacio de espejos o Voy a olvidarme de ti). ¿Cuál es el “mundo de lentejuelas” del que habla? Como toda interpretación, la mía es sólo una de tantas posibles. ¿Qué “mundo” permite olvidar, escaparse, tomar un respiro, mientras vemos “lentejuelas”, es decir, luces titilantes, inaprensibles? ¿Por qué no es más explícito? Yo creo que estamos ante un nuevo paraíso artificial, como diría André Breton. El escape a través del ácido (o la droga específica de que se trate) no es algo que reciba apologías públicas fácilmente. Pero lo compartamos o no, cantar lo prohibido requiere valentía. Algo similar ocurre en la canción A riesgo de perder la vergüenza de MCC sobre el tema homosexual, o en la novela Lolita de Vladimir Nabokov y el deseo hacia las adolescentes casi niñas. Lentejuelas, además, muestra el porqué, el contexto que hace sentir asfixiado y que lleva al escape a ese “mexicano medio” que no es tan medio: el artista. Que la vía es fallida y se llevó a Hendrix, Janis, Morrison, etc., es otra cosa. Pero la necesidad de Roberto González es de confesión, o mejor: de asumir lo que se es, la deficiencia, la fragilidad. Al final, ¿se es feliz, o se vive errante, escapando? Ni siquiera el autor puede responderlo, y comparte con nosotros su propio proceso de angustia, su propia duda metódica, lo que hace de esta rola un acto de honestidad intachable. Y si no es más explícito es por la misma fragilidad que la canción refleja. Pero obviamente caben otras interpretaciones. No obstante, la necesidad de escape ante una realidad demasiado áspera para el ser sensible sí es explícita en Lentejuelas, y esa sensibilidad golpeada es la de toda una generación, la posterior al 68, la de Roberto González, pero que podemos reconocer en cualquiera, pues el fondo opresivo para el verdadero artista se maquilla diferente, pero persiste.
La música de Lentejuelas, suave, con arreglo de balada-rock, parece salir del mismo vapor, de la misma neblina morada, leve, cadenciosa gracias a su solo de sax intermedio, sin mayor pretensión que la confesión (o auto-revisión) que encierra. No obstante, al final rompe en un jazz impecablemente ejecutado y casi gozoso (recurso muy semejante al que usa On’tá en Padre, padre, pero en el intermedio de la canción), como si quisiera remarcar musicalmente ese pequeño respiro del “mundo de lentejuelas” de la letra, como si esa música de jazz perteneciera a ese otro mundo, y marcara el ingreso a esa mínima alegría temporal, fugaz. Un recurso inteligente y de talento.
De este modo, Lentejuelas es una canción intimista, pero que representa una voz generacional, perdida y doliente, pero de gran valor histórico en México.
La música de Lentejuelas, suave, con arreglo de balada-rock, parece salir del mismo vapor, de la misma neblina morada, leve, cadenciosa gracias a su solo de sax intermedio, sin mayor pretensión que la confesión (o auto-revisión) que encierra. No obstante, al final rompe en un jazz impecablemente ejecutado y casi gozoso (recurso muy semejante al que usa On’tá en Padre, padre, pero en el intermedio de la canción), como si quisiera remarcar musicalmente ese pequeño respiro del “mundo de lentejuelas” de la letra, como si esa música de jazz perteneciera a ese otro mundo, y marcara el ingreso a esa mínima alegría temporal, fugaz. Un recurso inteligente y de talento.
De este modo, Lentejuelas es una canción intimista, pero que representa una voz generacional, perdida y doliente, pero de gran valor histórico en México.
Hola solo te queria avisar que habra un concierto de Roberto Gonzalez el 16 de abril a las 20:00 en una galeria-cafe El Tintanismo en Av. Azcapotzalco #451 Col. El recreo preventa $70 dia del evento $100 preventa martes y jueves en la galeria-cafe a partir de las 17:00 hrs tlazotla@yahoo.com.mx como tienes rolas de el pense que te podia interesar
ResponderEliminarMuchas gracias, estimado Anónimo. Me hubiera encantado ir, pero desgraciadamente hace ya algunos años que no radico en el D.F. Tuve la suerte de ver a Roberto en vivo varias veces, así que sé lo bueno que ofrece. Ni modo... Pero muchas gracias por el aviso, a ver si alguien se interesa.
ResponderEliminarMuchos saludos.
Estimado ave emplumada Pingüino, agarrada de las uñas entro esta deliciosa canción y como lo comentas, a mi me da a pensar en 2 vertientes que las “Lentejuelas” es drogas o es homosexual.
ResponderEliminarLa parte media con el sax hace que la canción se escuche “cachonda”, y si es una gran Rola.
Vientos por el buen Roberto Gonzalez!!
Saludos!!
Ah, jijo, esta interpretación homosexual sí que nunca se me había ocurrido, amigo Margarito. Me demuestra lo alucinante que son las canciones (bueno, todas las obras artísticas) abiertas. Me acordé que hace unos días viví todo un debate interpretativo de la película "Persona" de Bergman, y fue igual, varias visiones, centradas en detalles diferentes. Obviamente por su extensión una película otorga más elementos a tomar en cuenta que una letra de canción... Pero bueno, como dije, todas las interpretaciones son válidas. Sin embargo, hay algunas lexías que hacen que no me convenza la que señalas. Hay una cierta reiteración, un mínimo campo semántico que me habla más de evasión que de transformación o lado distinto. Por ejemplo, "regreso", "pasarme por aquí", "cómo todo sigue ahí" y "sigo ausente". Siento que el nivel metafórico que implicaría escoger estos elementos para el tema homosexual sería muy forzado; creo que un compositor experto como Roberto escogería otros, que no inclinaran la balanza hacia esa otra interpretación, sino que igual reforzaran la del mundo gay. Es decir, me parece que al sugerir el campo semántico de las drogas, funcionan mal como distractores, porque se esperarían más oscuros, menos alineados a otra línea interpretativa; y en cambio como indicios resultarían poco firmes justo por lo mismo. En fin, veremos qué opinan los demás.
ResponderEliminarMuchos saludos.
No sera que en esta rola Roberto Gonzalez, se refiera al mundo alternativo que frecuentan bastante los musicos y poetas, ese mundo al que tal vez no sea necesario visitar por medio de alguna droga, sin ser en nada parecidas, recorde una rola de Jaime Lopez llamada "asunto nausebundo", donde se hace referencia a ese mundo raro y etereo.
ResponderEliminarGracias por la interpretación, amigo Lalorock, como he dicho, respetable como cualquier otra. No obstante, no encuentro ningún indicio que se refiera siquiera indirectamente al "mundo artístico" que señalas. de hecho, si lo tomáramos así, la cualidad "brillosa" de las lentejuelas no sería la fundamental, así que habría que pensar otra. El problema es: ¿cuál? Porque su otro sentido más tradicional tiene que ver con eso que se llama "glamour", y nada estaría más alejdo que eso del mundo artístico o sensible de tu interpretación. Ojalá pudieras argumentar más por qué te parece que la rola va por el lado que señalas, sería muy interesante, y quizá nos develaría algo que no hemos visto.
ResponderEliminarMuchos saludos.
Esta tarde escuché varias veces el disco Lentejuelas (en mi teléfono tengo la versión donde viene "Domingo Azul/Pasado por intruso" como una sola, y en Spotify está la otra versión. Escuché ambas. Y no sé por qué, pero de pronto me pregunté si Roberto González no será homosexual. No recuerdo por qué lo pensé, algo en alguna letra me lo hizo pensar y recordé el título "Lentejuelas" y pensé que eso podría ser un argumento más, por eso vine aquí, para conocer tu interpretación. Margarito llegó a la misma idea que yo, aunque yo no lo hice mediante esta canción sino con otra, pero no recuerdo cuál. Lo escucharé de nuevo esperando dar con el fragmento que me hizo pensar en eso y si lo consigo, vendré a comentar.
ResponderEliminarSaludos.
Estupendo, estimado Jorge, a ver si logras aportar nuevos ángulos para esa línea interpretativa. Yo reitero lo que le dije al amigo Margarito, me sigue pareciendo más forzada esa interpretación. Y más porque no había oído nunca que Roberto pudiera ser gay, y mira que de otros músicos sí se corren esos rumores, que en otros casos son incluso certezas, a veces expresadas por ellos mismos. Obviamente es un dato interesante para la búsqueda del sentido de la rola, pero en nada modifica la calidad artística de la misma, ni mucho menos la de Roberto.
ResponderEliminarMuchos saludos.
Para quien se ha dado últimamente un rol por la Zona Rosa del DeFe, verá que ésta está totalmente iluminada, que al mirarla entrando por Reforma pareciera un lugar ajeno donde los heterosexuales son minoría. Es un sitio que brilla como las lentejuelas. Se habla de salir del clóset y es ahí donde algunos aprovechan para compartir su "intimidad" que sólo emerge cuando están en esa zona de confort, a la que acuden aunque sea a "mirar", entran para poder "respirar" y si se quedan pueden ser felices, de lo contrario a seguir "errantes".
ResponderEliminarGracias por aportar al debate, estimado M.A.R.X A mí sigue sin convencerme esa interpretación, porque las objeciones que se me ocurren siguen sin respuesta. Pero en fin, ahí están los argumentos, a ver qué siguen opinando los lectores...
ResponderEliminarSaludos.